TANATÓLOGA

la mano amorosa, un regalo de Dios.


Tal vez la muerte es tan dolorosa, porque cuando naces ves una cara amigable, y cuando mueres a veces, está el miedo de estar solo.

Para algunas profesiones hay que tener vocación, pero para ser tanatóloga se necesita ese don que llevo con alegría y orgullo.


(LPattydB).